El Gurri Xic, Taradell (Osona)
En una de mis excursiones en coche, sin objetivo claro, esta vez decidí perderme por los alrededores de Vic. Y…¡bingo! Encontré uno de los tipos de restaurante que más me gustan: familiar, sencillo, de trato muy agradable y en medio de la nada: "El Gurri Xic". Este pasado sábado 23 de marzo, decidimos ir a probrarlo. ¡Premio!
Ubicado exactamente en la Carretera de Montrodon, 08552 Taradell, Barcelona. Si vas por la C-17 dirección a Vic (desde Barcelona), o si vas por el interior desde Vic a Taradell por la B-520, de cualquier forma no tiene ninguna pérdida. En la carretera llegarás a una rotonda, donde podrás entrar en una urbanización de chalets. Un cartel ya te indica la dirección… todo recto, fácil!
Tienen 2 salones, un interior, espacioso, con vistas a la montaña, y otro en el otro lado de la masía, que parece un añadido a la estructura original de la casa, pero que le da un ambiente aún más rural, con su chimenea enorme para la brasa, ventanales de madera hacia los bosques, y manteles de papel morado de lo más "casero".
Como mandan los cánones, y estando en la temporada de calçots, el menú estaba más que claro. En el Gurri Xic ofrecen 2 menús de calçotada: uno de 25€ y otro de 20€. Ambos incluyen: ración de calçots por persona (18ud. o 25ud. según el menú escogido), parrillada de carne (completa: butifarra, costillas, "mongeta" blanca, patata al horno, patatas y tomate asado), postre (a escoger), vino, gaseosa, agua, pan, café… ¡y botella de cava! Todo por el precio comentado y con el IVA incluido. A destacar el postre "Valenciano": helado de vainilla con zumo de naranja… ¡espectáculo! y buen digestivo.
Pero no nos quedemos sólo con la calçotada. Si encargas con antelación, puedes disfrutar de una buena caracolada (¡me lo apunto para la siguiente visita!) a parte de una completa carta, donde dominan las brasas. En la mesa, pudimos degustar otros platos, a parte de los calçots. Dimos buena cuenta de manjares como: una ensalada con queso de cabra (buen detalle el añadirle trocitos de fresa), espárragos verdes a la plancha (gordos y sabrosos) o unos canelones de pollo bien hermosos.
Y aún hay más… Detallazo: para los amantes de la combinación café + copa+ puro, podéis salir a las mesitas que tienen montadas en la entrada y disfrutar del momento digestivo rodeados de paz, naturaleza y silencio.
¡Pero aún hay más! Para abrir hambre, a parte de dar un buen paseo por sus alrededores, podéis practicar el tiro con arco allí mismo. Pero mejor informaros en su web o en el teléfono 938 80 08 28.
Resumiendo: todo un disfrute de la "gastrononaturaleza", a apenas 45 minutos de Barcelona.
Para la próxima, una caracolada. ¿Quién se apunta? ¡Ahí lo dejo!
Ubicado exactamente en la Carretera de Montrodon, 08552 Taradell, Barcelona. Si vas por la C-17 dirección a Vic (desde Barcelona), o si vas por el interior desde Vic a Taradell por la B-520, de cualquier forma no tiene ninguna pérdida. En la carretera llegarás a una rotonda, donde podrás entrar en una urbanización de chalets. Un cartel ya te indica la dirección… todo recto, fácil!
Tienen 2 salones, un interior, espacioso, con vistas a la montaña, y otro en el otro lado de la masía, que parece un añadido a la estructura original de la casa, pero que le da un ambiente aún más rural, con su chimenea enorme para la brasa, ventanales de madera hacia los bosques, y manteles de papel morado de lo más "casero".Como mandan los cánones, y estando en la temporada de calçots, el menú estaba más que claro. En el Gurri Xic ofrecen 2 menús de calçotada: uno de 25€ y otro de 20€. Ambos incluyen: ración de calçots por persona (18ud. o 25ud. según el menú escogido), parrillada de carne (completa: butifarra, costillas, "mongeta" blanca, patata al horno, patatas y tomate asado), postre (a escoger), vino, gaseosa, agua, pan, café… ¡y botella de cava! Todo por el precio comentado y con el IVA incluido. A destacar el postre "Valenciano": helado de vainilla con zumo de naranja… ¡espectáculo! y buen digestivo.
Pero no nos quedemos sólo con la calçotada. Si encargas con antelación, puedes disfrutar de una buena caracolada (¡me lo apunto para la siguiente visita!) a parte de una completa carta, donde dominan las brasas. En la mesa, pudimos degustar otros platos, a parte de los calçots. Dimos buena cuenta de manjares como: una ensalada con queso de cabra (buen detalle el añadirle trocitos de fresa), espárragos verdes a la plancha (gordos y sabrosos) o unos canelones de pollo bien hermosos.
Y aún hay más… Detallazo: para los amantes de la combinación café + copa+ puro, podéis salir a las mesitas que tienen montadas en la entrada y disfrutar del momento digestivo rodeados de paz, naturaleza y silencio.
¡Pero aún hay más! Para abrir hambre, a parte de dar un buen paseo por sus alrededores, podéis practicar el tiro con arco allí mismo. Pero mejor informaros en su web o en el teléfono 938 80 08 28.
Resumiendo: todo un disfrute de la "gastrononaturaleza", a apenas 45 minutos de Barcelona.
Para la próxima, una caracolada. ¿Quién se apunta? ¡Ahí lo dejo!
Comentarios
Publicar un comentario